Redacción Farmacosalud.com
El Consejo de Ministros de España ha aprobado, a propuesta del Ministerio de Sanidad, el Plan Nacional contra el Radón con el objetivo de proteger la salud del conjunto de la población, y las personas trabajadoras en particular, frente a los riesgos de la exposición a este elemento químico en forma gaseosa, informa Sanidad mediante un comunicado. El nuevo programa describe los riesgos derivados de la exposición al radón, analiza la situación en España con respecto a las medidas de protección, y recoge las estrategias y actuaciones que se desarrollarán por las distintas Administraciones durante un periodo de 5 años, para el control del riesgo para la salud de la población derivado de la exposición a este gas.
Este Plan se articula en torno a cinco ejes estratégicos:
1- Conocimiento e infraestructura básica
2- Edificación
3- Lugares de trabajo
4- Zonas de actuación prioritaria
5- Comunicación y concienciación
Efecto sinérgico de radón y tabaco
Estos cinco ejes engloban, a su vez, actuaciones para conocer la magnitud del problema, como evaluar la exposición de la población al radón y estimar su incidencia sobre la salud de la población; reducir la concentración de este elemento químico en los edificios, o impulsar programas de formación específicos para los distintos agentes que intervienen en el ámbito de la edificación.
Otra de las actuaciones va a servir para potenciar la concienciación del público, los profesionales y Administraciones sobre los efectos del radón en la salud y, en particular, en combinación con el tabaco. En este caso, los efectos se encuentran notablemente aumentados, debido al efecto sinérgico del radón y el tabaco.
El radón es un gas radiactivo de origen natural que se produce por la descomposición de uranio. Es un gas invisible, inodoro, insípido que se filtra a través del suelo y se difunde en el aire. En algunas zonas, dependiendo de la geología del lugar, el radón se disuelve en el agua subterránea y puede difundirse en el aire cuando se usa esa agua […] En las casas y los edificios los niveles de radón están incrementados porque el radón penetra a través de grietas en los cimientos y en los sótanos1.
El principal factor del que depende la concentración de radón en el interior de una vivienda es la composición del subsuelo sobre el que ha sido construido el inmueble. La principal vía de entrada del radón, aunque no la única, son las grietas y fisuras que se originan en las construcciones, de ahí la importancia de un correcto aislamiento de las edificaciones de nueva construcción. Debido a que la presión en el interior de las viviendas es menor que la del subsuelo, la casa ejerce un efecto de vacío que hace que el gas se acumule en el interior de la misma, y como es más denso que el aire, tiende a acumularse en las zonas más bajas de las edificaciones.
Referencias
1. Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Radón, un gas cancerígeno. Difusión online: https://www.aecc.es/es/todo-sobre-cancer/prevencion/radon