Redacción Farmacosalud.com
Investigadores del SJD Pediatric Cancer Center Barcelona (PCCB) del Hospital Sant Joan de Déu (Esplugues de Llobregat, en Barcelona) han desarrollado un método que permite predecir la eficacia de nab-paclitaxel, un conocido nanofármaco, en modelo animal, para el tratamiento del sarcoma de Ewing, un grave cáncer del esqueleto y los tejidos blandos que afecta a niños y adolescentes. En concreto, han descubierto que solo los sarcomas de Ewing que no contienen la proteína Bcl-2 en sus células tumorales –eso sucede en uno de cada cinco casos- responden bien a esta medicación.
Este hallazgo permitirá seleccionar los pacientes a los que se les puede administrar la medicina con expectativas reales de éxito. La investigación ha sido publicada en la revista ‘Biochemical Pharmacology’.
Partículas de albúmina unidas a paclitaxel
Nab-paclitaxel está hecho de partículas de albúmina unidas a paclitaxel. Fue desarrollado por Celgene, una compañía de Bristol Myers Squibb. Nab-paclitaxel está aprobado para su uso como tratamiento de primera línea en pacientes adultos con adenocarcinoma pancreático metastásico, cáncer de mama y cáncer de pulmón de células no pequeñas. Actualmente no hay indicaciones aprobadas para pacientes pediátricos.
En niños, este tratamiento se usa solo de manera experimental, en el marco de ensayos clínicos. Los investigadores del PCCB han descubierto que nab-paclixatel no resulta eficaz en los sarcomas de Ewing cuyas células tumorales contienen la proteína Bcl-2. Además del sarcoma de Ewing, han estudiado otros tumores pediátricos como el rabdomiosarcoma y el tumor de Wilms. En estos otros tumores, los científicos han descubierto que no existe una relación clara entre la presencia o ausencia de Bcl-2 y la eficacia del nab-paclitaxel.
El director del nuevo estudio, el Dr. Ángel Montero Carcaboso, explica que llevaron a cabo la investigación en 28 tumores de pacientes pediátricos injertados en ratones para encontrar un rasgo común en ellos que ayudase a predecir si esta medicina tendría eficacia o no. “La mayoría de estos tumores, 15, fueron sarcomas de Ewing, de los cuales tres desaparecieron tras el tratamiento. En esos tres tumores no encontramos ni rastro de Bcl-2”, relata. “Durante ocho años- añade Montero- injertamos tumores de pacientes nuevos en ratones y fuimos realizando estudios hasta tener un número que nos diera una potencia estadística suficiente para identificar un marcador de respuesta al tratamiento, un biomarcador”. El nuevo trabajo sugiere que uno de cada cinco pacientes con sarcoma de Ewing resistente a tratamientos de primera y segunda línea podría beneficiarse del nab-paclitaxel tras someterse a una sencilla prueba para detectar Bcl-2.
Aplicar un inhibidor de Bcl-2 revierte la resistencia a nab-paclitaxel en algunos tumores
El estudio también sugiere la manera de aumentar la eficacia de nab-paclitaxel en los pacientes con positividad de Bcl-2, ya que existen tratamientos para anular la acción de esta proteína. “Observamos que la terapia combinada con un inhibidor de Bcl-2 revirtió la resistencia a nab-paclitaxel en algunos de los tumores”, señala Guillem Pascual Pastó, primer autor del artículo. La investigación del hospital SJD en cáncer infantil ha resultado en diversos ensayos clínicos fase 1 en niños con cáncer, algunos de ellos terapias avanzadas.
La actividad científica del Pediatric Cancer Center Barcelona forma parte de uno de los programas de investigación del Institut de Recerca Sant Joan de Déu (IRSJD), reconocido dentro del sistema CERCA de la Generalitat de Catalunya como centro de investigación de excelencia. Actualmente el Dr. Montero lidera el grupo de investigación Tratamiento del cáncer pediátrico dentro del IRSJD.
Artículo de referencia
Pascual-Pasto G, Resa-Pares C, Castillo-Ecija H, Aschero R, Baulenas-Farres M, Vila-Ubach M, et al. Low Bcl-2 is a robust biomarker of sensitivity to nab-paclitaxel in Ewing sarcoma. Biochem Pharmacol. 2023;208:115408.