Redacción Farmacosalud.com
Investigadores del Clínic-IDIBAPS (Barcelona) han publicado un estudio en el que se observa el beneficio de la terapia con perros como un tratamiento complementario dentro del Hospital de Día de salud mental infantojuvenil. La terapia asistida con canes actúa como un catalizador para mejorar la terapia de los usuarios menores de 13 años. El proyecto se ha llevado a cabo junto con profesionales de CTAC, especialistas en realizar este tipo de terapias con animales, y gracias a la colaboración de Purina y la Fundación ‘la Caixa’ a través de CaixaBank.
El nuevo trabajo ha sido liderado por Elías Guillén, enfermero especialista de salud mental e investigador principal del estudio, junto con la Dra. Astrid Morer, psiquiatra e investigadora del grupo de Psiquiatría y Psicología Infantil y Adolescente del IDIBAPS y del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM). Ambos forman parte del Servicio de Psiquiatría y Psicología Infantil y Juvenil del Hospital Clínic de Barcelona dirigido por la Dra. Luisa Lázaro. “El estudio nos indica que la introducción de los perros en la terapia es un facilitador, un enlace emocional entre el terapeuta y el menor, y actúa como catalizador de la terapia”, comenta la Dra. Astrid Morer.
“Se observa una mejoría en la asistencia, y los niños están más tranquilos”
“Los resultados observados son muy positivos: se observa una mejoría en la asistencia, vemos como los niños están más tranquilos y es más fácil trabajar los objetivos que nos planteamos con ellos”, explica Guillén. El número de crisis emocionales y agitaciones observado en el estudio fue significativamente inferior los días en que había terapia con perros, aproximadamente tres veces menos, comparado con los días con terapia sin estos animales de compañía. “Vimos como aproximadamente el 75% de las crisis tuvieron lugar los días sin perro, mientras que solo se dieron el 25% de éstas los días con perro”, describe Guillén. También la asistencia al centro fue mayor los días en que el tratamiento contaba con la presencia de los canes, en comparación con los días sin estos animales.
“Además la presencia de los perros facilita el autocontrol y el funcionamiento social de los niños”, añade Guillén. Los resultados de los cuestionarios que establecen el grado de autocontrol y habilidades sociales de los pacientes, cumplimentados por los profesionales, indicaron una mejoría de manera significativa después del tratamiento. Sin embargo, los mismos cuestionarios cumplimentados por los tutores de los menores no obtuvieron grandes diferencias tras el tratamiento, por lo que la terapia parece ser beneficiosa y demuestra resultados dentro del contexto del Hospital de Día.
Los investigadores destacan que el paciente tiene una predisposición al cambio diferente cuando está el perro que si no está. “Nos facilita nuestro trabajo. El día que vienen aquí los perros hay un ambiente diferente y esto nos permite acceder más fácilmente al niño… hay menos agitaciones, todo es mucho más fácil”, explica el enfermero. En las entrevistas a profesionales que se realizaron en el marco del ensayo, se destacó que el tratamiento con las mascotas mejora la autorregulación emocional del menor y facilita el trabajo de los terapeutas, pese a la incertidumbre que mostraron los monitores en un inicio debido a la falta de familiaridad con este tipo de abordajes terapéuticos.
Sesiones un día concreto de la semana de 45 minutos por paciente, durante 2 años
Las sesiones con perros se incorporaron dentro de las dinámicas del Hospital de Día, realizándose un día concreto de la semana con una duración de 45 minutos por paciente, durante 2 años (salvo 4 meses de confinamiento por la pandemia). Se realizaron diferentes sesiones individuales, grupales, familiares, visitas terapéuticas y acompañamientos a otros procedimientos. “Es increíble como los niños y niñas acceden a realizar o enfrentar situaciones con el perro, como por ejemplo una analítica, que sin él no hacen”, comenta la Dra. Morer. La terapia asistida con animales utiliza animales entrenados para facilitar a la persona enfrentarse a determinadas situaciones o lograr los objetivos terapéuticos pautados de forma complementaria a otros tratamientos clínicos.
Los menores que participaron en el estudio presentaban trastorno del espectro autista (sin sintomatología muy severa), trastornos de conducta o ansiedad. En el estudio se llevaron a cabo dos análisis. Por un lado, se realizó un análisis cuantitativo sobre el tratamiento realizado en 23 menores de 13 años. En este trabajo se cuantificó el número de crisis emocionales o conductuales y la asistencia al Hospital de Día, además de la cumplimentación de dos cuestionarios por parte de los tutores del menor y de los profesionales sanitarios. Estos cuestionarios validados ‒ Self-Control Rating Scale (SCRS) y Social Responsiveness Scale-2 (SRS-2) ‒ miden el nivel de autocontrol y habilidades sociales del menor. Por otro lado, se realizó un análisis cualitativo del impacto de la terapia asistida con perros a través de 12 entrevistas a profesionales de salud mental que tuvieron contacto con este tipo de tratamiento.
“En Purina estamos convencidos de los beneficios que aporta la convivencia con mascotas a la sociedad y, por eso, desde 2015 tenemos en marcha investigaciones que nos permiten seguir recopilando evidencias relacionadas con el vínculo humano-animal. Este estudio es una prueba más de la importancia que tiene seguir investigando en este terreno para ayudar cada vez más a más personas. Los animales tienen mucho para aportarnos y queremos seguir poniéndolo de manifiesto en cada acción que podamos”, comenta Mark El-Khoury, director general de Purina España.
Teniendo en cuenta estos resultados favorables, se pretende ampliar el estudio e incluir a menores de entre 13 y 17 años que acuden al Hospital de Día de la misma unidad. Esta ampliación se podrá llevar a cabo gracias a la colaboración de la Fundación ‘la Caixa’. En el ensayo también han participado: Laia Sastre, Pilar Santamarina-Perez, Laura Hermida, Marta García, Miguel Romero, Yeray Pastor, Cristina Diaz, Soledad Romero y Laura Real, del Servicio de Psiquiatría y Psicología Infantil y Juvenil, y Eva Domenec y Francesc Ristol, directores del programa de Intervenciones Asistidas con Perros – Método CTAC aplicado en hospitales.
Referencia del estudio:
Guillén Guzmán E, Sastre Rodríguez L, Santamarina-Perez P, Hermida Barros L, García Giralt M, Domenec Elizalde E, et al. The Benefits of Dog-Assisted Therapy as Complementary Treatment in a Children’s Mental Health Day Hospital. Animals. 2022; 12(20):2841.