Redacción Farmacosalud.com
Un nuevo biomarcador epigenético que puede analizarse en muestras sanguíneas permitiría diagnosticar el cáncer colorrectal (CCR) en sus etapas más iniciales. Así, una investigación establece que la detección de la metilación del gen LINC00473 a través de biopsia líquida podría ser útil para el cribado no invasivo de esta afección en las personas que todavía no presentan síntomas. “En nuestro trabajo hemos podido comprobar que el análisis en sangre de este biomarcador fue capaz de detectar la presencia tanto de cáncer de colon como de sus fases iniciales en hasta un 85% de los pacientes analizados”, afirma el Dr. Ángel Díaz-Lagares, investigador CIBER (CIBERONC) del Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago de Compostela (IDIS, en la Coruña) y del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS).
Un estudio colaborativo liderado por Díaz-Lagares y el Dr. Rafael López, también miembro del CIBERONC, IDIS y CHUS, y que publica la revista ‘Clinical Epigenetics’, confirma que la detección de la metilación del gen LINC00473 a través de biopsia líquida podría ser útil para el cribado no invasivo del cáncer colorrectal en las personas que todavía no presentan síntomas, habiéndose demostrado también su utilidad para evaluar la eficacia del tratamiento en pacientes con CCR avanzado. “La prueba descrita en el trabajo se realiza en una muestra sanguínea con el fin de detectar la metilación del gen LINC00473 en fragmentos de ADN que circulan libres en la sangre. Se trata de una prueba que no es muy costosa, por lo que su implementación sería fácilmente asumible por nuestro sistema sanitario”, aduce desde www.farmacosalud.com Díaz-Lagares.
Se espera que la prevalencia de esta afección aumente un 60% en los próximos años
El tumor maligno colorrectal es el tercer tipo de cáncer detectado con mayor frecuencia en todo el mundo. Se espera que su prevalencia aumente en un 60% –más de 2,2 millones de casos nuevos– de aquí al 2030. El CCR generalmente se diagnostica en una etapa avanzada y por ello representa una de las principales causas de mortalidad por cáncer. La incidencia creciente y las altas tasas de mortalidad de estas neoplasias resaltan la necesidad clínica de nuevas estrategias para mejorar la detección temprana del CCR.
La carcinogénesis colorrectal es un proceso de varios pasos que implica alteraciones genéticas y epigenéticas. La mayoría de los CCR (70%) se originan a partir de una lesión precursora colorrectal común que potencialmente puede malignizarse. Entre estas lesiones precancerosas, algunas se definen como pólipos colorrectales avanzados (PCA), que presentan un mayor riesgo de transformación a cáncer.
Entre las pruebas para el diagnóstico del CCR, la colonoscopia se considera la técnica estándar, pero se trata de un procedimiento invasivo con riesgo de complicaciones y escasa adherencia por parte de los pacientes. Como alternativa, la prueba inmunoquímica fecal es ampliamente utilizada para detectar la presencia de hemoglobina fecal, pero ha mostrado algunas limitaciones, incluida la incapacidad para identificar de forma fiable lesiones precancerosas colorrectales, como los PCA. De ahí que se necesiten con urgencia nuevas pruebas no invasivas para la detección temprana de este tipo de cáncer. Los avances en este campo pueden venir de la mano de la biopsia líquida, un test que se realiza en una muestra sanguínea con el fin de buscar células cancerosas o fragmentos de ADN de las células tumorales que circulan por la sangre.
En este contexto, la investigación liderada por Díaz-Lagares y López desde el CIBERONC se centró en evaluar la metilación del gen LINC00473 como biomarcador para el diagnóstico del cáncer de colon a través de biopsia líquida. “Las marcas epigenéticas como la metilación del ADN controlan el funcionamiento de nuestros genes actuando como ‘interruptores’ capaces de controlar cuáles de nuestros genes tienen que estar ‘encendidos’ y cuáles deben de estar ‘apagados’. Estas marcas epigenéticas pueden estar alteradas en las etapas más iniciales del cáncer, convirtiéndolas en biomarcadores ideales para la detección precoz de la patología. Se trata de alteraciones epigenéticas que se producen en las células del cáncer y que pueden ser detectadas mediante biopsia líquida”, explica mediante un comunicado el Dr. Díaz-Lagares.
Buscar en el ‘ADN basura’
“En concreto, este nuevo biomarcador epigenético se basa en el análisis de la metilación del gen denominado LINC00473, que se localiza en una zona de nuestro ADN que hasta hace poco se conocía con el nombre de ‘ADN basura’, ya que se creía erróneamente que no tenía ninguna función”. Ahora se sabe que LINC00473 tiene propiedades supresoras de tumores y que se expresa con menor frecuencia en este tipo de cáncer, el colorrectal. “En la carcinogénesis, la hipermetilación de los genes supresores de tumores representa un evento temprano asociado con su silenciamiento transcripcional, lo que conduce a la iniciación del tumor y la progresión de la enfermedad”, detalla.
En la nueva investigación se analizaron datos de un total de 645 pacientes procedentes de 10 centros hospitalarios (9 en España y uno en EEUU) y 233 individuos sanos. Los resultados confirmaron la metilación de LINC00473 como un biomarcador que permite detectar precozmente el cáncer colorrectal. “Se trata de un biomarcador detectable por biopsia líquida con alta precisión diagnóstica, incluso en las etapas más iniciales del CCR, cuando aparecen los pólipos avanzados, que son las lesiones premalignas que representan la antesala del cáncer colorrectal”, señala por su parte López.
“El análisis de la metilación del gen LINC00473 en muestras de sangre ha mostrado utilidad para detectar la presencia de pólipos colorrectales avanzados, los cuales pueden llegar a originar un cáncer colorrectal en unos 2-3 años. Aunque en este trabajo no hemos evaluado todavía cada cuanto tiempo se debería llevar a cabo esta prueba, estimamos que la realización de este test cada 2-3 años dentro de un programa de cribado podría ser una buena opción para detectar el CCR en sus fases más iniciales”, sugiere el Dr. Díaz-Lagares.
Investigación de alcance internacional
Pero es que, tal y como se ha comentado anteriormente, el análisis de este biomarcador epigenético también mostró utilidad a la hora de evaluar la eficacia del tratamiento frente a esta dolencia en estadíos avanzados. “Los niveles de la metilación del gen LINC00473 detectados en la sangre de los pacientes con cáncer colorrectal avanzado mostraron capacidad para detectar la cantidad de tumor colorrectal que presentan estos pacientes. De este modo, en función de los niveles de metilación de este gen observados, fue posible detectar si durante el tratamiento recibido por los pacientes el tamaño de su tumor disminuía, respondiendo así a la terapia, o bien si este tamaño aumentaba debido a la progresión de su enfermedad”. Por tanto, “el descubrimiento de este nuevo biomarcador no invasivo supone un avance importante para el diagnóstico precoz y la medicina de precisión” en el ámbito de esta afección tumoral, concluyen ambos investigadores.
En el estudio han participado 24 científicos de 10 instituciones, entre ellas el CIBER a través de sus áreas de Cáncer (CIBERONC), Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBEROBN) y Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP). El nuevo trabajo ha sido financiado con fondos procedentes de diferentes organismos públicos y privados, nacionales e internacionales, así como por donaciones recibidas por el grupo ONCOMET durante una campaña de micromecenazgo de Biopsia Líquida realizada en 2017.
El descubrimiento del biomarcador epigenético LINC00473 ha dado lugar a una patente basada en el diagnóstico del cáncer colorrectal y sus lesiones precancerosas.
Artículo de referencia:
Ruiz-Bañobre J, Rodriguez-Casanova A, Costa-Fraga N, Bao-Caamano A, Alvarez-Castro A, Carreras-Presas M, et al. Noninvasive early detection of colorectal cancer by hypermethylation of the LINC00473 promoter in plasma cell-free DNA. Clin Epigenetics. 2022;14(1):86.