Redacción Farmacosalud.com
El proyecto ‘Stop Incontinencia Urinaria’ (STOPIU) ha propiciado la elaboración de unas bragas cuya estructura textil multicapa permite retener fluido sin que la usuaria note ningún tipo de molestia, de ahí que sean ideales para aquellas mujeres afectadas de incontinencia urinaria (IU) de esfuerzo. La composición de esta nueva prenda íntima femenina aguanta todo un día sin que la portadora tenga que cambiarse y tiene la particularidad de que es reutilizable, es decir, puede lavarse y volverse a usar varias veces.
Las pacientes que la han probado comentan que “no se tenían que cambiar las braguitas durante todo un día” gracias a la capacidad de absorción y transpirabilidad de esta nueva prenda íntima femenina, que consigue “un secado rápido” y logra “eliminar o prevenir los olores”, asegura a www.farmacosalud.com Esther Franquet, directora de Enfermería de la Fundació Puigvert (Barcelona) [Fundación]. “Es una prenda reutilizable con un impacto importante en el medio ambiente si tenemos en cuenta que una paciente con Incontinencia Urinaria de Esfuerzo puede llegar a usar hasta 4-5 compresas o salvaslips al día”, destaca Franquet. La IU de esfuerzo afecta hasta el 40% de las mujeres en España y tiene efectos físicos y psicológicos que influyen en su bienestar1.
El componente básico, fibra natural de bambú
Así pues, el proyecto STOPIU ha concluido con éxito la fase de validación clínica de estas bragas destinadas a paliar los efectos de dicha patología urinaria. El diseño y desarrollo de la prenda ha sido llevado a cabo entre la empresa industrial textil Goher Textil Calella, el centro tecnológico Fitex y la Fundació Puigvert, que ha realizado el estudio de validación clínica de los prototipos con pacientes reales. El componente básico de las bragas STOPIU es la fibra natural de bambú y sus principales ventajas son la rápida absorción y la transpirabilidad, lo que asegura una mayor sensación de comodidad y seguridad. Además, su utilización minimiza la generación de residuos, ya que actualmente la mayoría de mujeres afectadas usan abundantes compresas o salvaslips, tal y como se ha apuntado anteriormente.
El desarrollo de la nueva prenda se ha financiado con una subvención del Ministerio de Ciencia e Innovación (CDTI) a partir del estudio exhaustivo de los movimientos corporales de esfuerzo que originan pérdidas de la continencia urinaria como estornudar, agacharse, hacer deporte, etc. Para el diseño de las bragas, y con el propósito de naturalizar la existencia de esta afección, también se han considerado parámetros estéticos.
Un invento que podría mejorar el bienestar de 3 millones de mujeres en España
Durante la fase de validación, realizada por el equipo de Enfermería de la Fundació Puigvert, se seleccionó una cohorte de 20 mujeres de entre 40 y 65 años que sufren incontinencia urinaria de esfuerzo con pérdidas leves. “Pensamos que la IU afecta a las mujeres a partir de los 50-65 años, pero la realidad es que se trata de una patología presente en todos los grupos de edad, con variedad en la naturaleza y gravedad de los síntomas”, explica mediante un comunicado Franquet.
Por cierto, las 20 pacientes que probaron la prenda “no mostraron ningún tipo de efecto adverso a nivel tópico por contacto o roce, ni alergia, ni dermatitis”, remarca la directora de Enfermería de la Puigvert.
La inmensa mayoría valoró positivamente la sensación de sequedad y la comodidad
Aunque la edad es un factor no modificable que aumenta la posibilidad de padecer IU, también se ha hablado del embarazo y del parto como posibles eventos que contribuyen a su aparición. Según un estudio publicado por la Agencia de Calidad y Evaluación Sanitarias de Cataluña (AQuAS), la proporción de incidencia de la IU atribuible al embarazo es de un 39%, aumentando hasta un 49% en la incontinencia urinaria atribuible al parto vaginal2. Fue el caso de Ana, nombre ficticio de una mujer que, a los 35 años, sufrió IU después de dar a luz a su segundo hijo: “durante el embarazo, no tuve ningún tipo de complicación, pero el parto me provocó un desgarro vaginal que me causó incontinencia. Tuve problemas para orinar durante todo un año, así como varias infecciones de las vías urinarias. Fue entonces cuando consulté con un urólogo que, con diversas pruebas diagnósticas y el tratamiento adecuado, me resolvió el problema”.
Los resultados del trabajo de validación indican que el 95% de las participantes del estudio valoró como buena la capacidad de absorción y la transpirabilidad asociadas a la nueva prenda, el 90% la eliminación del mal olor, y 3 de cada 4 valoró positivamente la sensación de sequedad, la buena adaptación al cuerpo y la comodidad. Así, las bragas STOPIU estarán disponibles antes del verano en los puntos de venta, fruto del acuerdo de Goher Industrial Textil con otras empresas especializadas del sector.
La incontinencia urinaria es un problema muy común. Según datos publicados por la Asociación Europea de Urología (EAU, por sus siglas en inglés) durante la Urology Week 2021, 1 de cada 5 personas sufre algún tipo de IU. El 36%, sin embargo, no busca ayuda profesional pensando que el problema se solucionará por sí solo y casi un tercio de las/los afectados no se siente cómodo hablando de ello. ‘Y es que los tabús y las campañas de marketing lanzadas para solucionar las pérdidas de orina han normalizado el hecho de que una mujer a cierta edad deba sufrir de incontinencia’, sostiene la nota difundida por la Puigvert. “Esto provoca que las mujeres no busquen ayuda profesional y exista un infradiagnóstico de la IU -señala Franquet-, haciendo que, cuando las pacientes consultan el problema, éste ya haya empeorado y las alternativas terapéuticas sean más limitadas”.
“Las mujeres acuden al ginecólogo, pero no al urólogo”
En este sentido, es igual de importante desestigmatizar la existencia de la IU, algo que puede conseguirse realizando un diagnóstico precoz y seleccionando el tratamiento adecuado, que puede ir desde algo tan sencillo como usar productos de contención o modificar el estilo de vida, hasta la estimulación eléctrica temporal, permanente o la cirugía.
El Dr. Carlos Errando, jefe de la Unidad de Urología Funcional y Femenina del Servicio de Urología de la Fundació Puigvert, manifiesta la importancia de consultar a un/a especialista en Urología: “las mujeres acuden al ginecólogo, pero no al urólogo. Aunque se trate de pérdidas leves, la incontinencia urinaria es algo que altera la calidad de vida, y, con un buen diagnóstico, se puede tratar y encontrar una solución”.
Referencias
1. La incontinencia urinaria. J.E Robles. Departamento de Urología. Clínica Universitaria de Navarra. Pamplona. An. Sist. Sanit. Navar. 2006, Vol. 29, Nº 2, mayo-agosto.
2. Estimación de la incidencia de incontinencia urinaria asociada al embarazo y el parto. Agencia de Calidad y Evaluación Sanitarias de Cataluña (AQuAS). Informes de Evaluación de Tecnologías Sanitarias AATRM Núm. 2006/10.