Redacción Farmacosalud.com
Los datos sobre hipertensión arterial no invitan, precisamente al optimismo, sino todo lo contrario. Del metaanálisis ATOM se desprende que en torno al 50% de los hipertensos no están controlados adecuadamente. Pero es que el doctor Gabriel Coll de Tuero, médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria de la Unidad de Investigación del Instituto Catalán de la Salud, va más allá: “La adherencia a las recomendaciones efectuadas por el profesional sanitario en el caso de la hipertensión arterial no es superior al 50% en el mejor de los casos”. En el terreno del deficiente cumplimiento terapéutico, Coll de Tuero no se anda por las ramas: “dentro de las causas de una mala adherencia a las recomendaciones de los profesionales de la salud, es evidente que muchas corresponden a aspectos relacionados con el paciente. Sin embargo, se han descrito algunas características relacionadas con los profesionales que se asocian a peor adherencia: prescripción de un número de tomas elevado de fármacos durante el día, y la falta de empatía* o un estilo de gestión del profesional que dificulte el ‘empowerment’ del paciente”, entre otros factores.
“Los resultados de distintos estudios realizados en nuestro país muestran que menos del 50% de los pacientes con hipertensión arterial están controlados adecuadamente. El estudio ATOM se concibe como ayuda a la toma de decisiones en el tratamiento farmacológico de la hipertensión arterial indicando qué descensos de la presión arterial podemos esperar con las distintas familias de antihipertensivos y con los fármacos antihipertensivos específicos en monoterapia o en combinación”, argumenta el facultativo a través de www.farmacosalud.com.
Cuatro grandes causas implicadas en el mal control
Según Coll de Tuero, “las causas del control mejorable de la hipertensión arterial son múltiples”, si bien se pueden agrupar en 4 grandes áreas:
a) Causas propias del paciente. La adherencia a las recomendaciones efectuadas por el profesional sanitario en el caso de la hipertensión arterial no es superior al 50% en el mejor de los casos.
b) Causas propias del profesional. Se ha descrito que existe inercia en un porcentaje importante de los casos debida a múltiples causas.
c) Causas relacionadas con el tratamiento antihipertensivo, por insuficiente, inadecuado, con interacciones o con efectos adversos.
d) Causas propias de la enfermedad. Se ha descrito que determinados condicionantes clínicos como la diabetes o la enfermedad vascular sintomática o subclínica se asocian a una mayor dificultad para el control de la presión arterial.
Las medidas a adoptar para revertir esa tendencia “deben estar dirigidas a las principales causas mencionadas”, iniciativas que ya “han sido probadas en distintos estudios -explica-. Van desde medidas de gestión de la consulta hasta el seguimiento de los protocolos derivados de las principales Guías de práctica clínica, pasando por aspectos de la entrevista clínica con el paciente”.
Poca percepción del riesgo en enfermedades crónicas asintomáticas
Los datos sobre cumplimiento terapéutico son igualmente descorazonadores. El doctor Coll de Tuero sostiene que la adherencia a las recomendaciones efectuadas por el profesional sanitario en el caso de la hipertensión arterial no es superior al 50% en el mejor de los casos. De hecho, en 2012 -cifras consultadas por www.farmacosalud.com- ya aparecían datos según los cuales alrededor del 50% de los pacientes con hipertensión dejaban el medicamento prescrito el primer año de diagnóstico y del resto solo el 50-66% continuaban con el tratamiento indicado. El experto opina lo siguiente: “dentro de las causas de una mala adherencia a las recomendaciones de los profesionales de la salud, es evidente que muchas corresponden a aspectos relacionados con el paciente. Sin embargo, se han descrito algunas características relacionadas con los profesionales que se asocian a peor adherencia: prescripción de un número de tomas elevado de fármacos durante el día, y la falta de empatía o un estilo de gestión del profesional que dificulte el ‘empowerment’ del paciente. También la falta de tiempo en la consulta, la gestión inadecuada del tiempo o de la agenda o la dificultad para acceder a la consulta programada se han asociado con peor adherencia”.
De acuerdo con algunos estudios, la no adherencia es especialmente mayor en pacientes que padecen enfermedades crónicas. Además, según un documento difundido por la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA), un estudio realizado en Finlandia revela que las personas jubiladas presentan un menor grado de adherencia al tratamiento de la hipertensión arterial. Para el doctor Coll de Tuero, las causas de ese incumplimiento “probablemente radican en la poca percepción del riesgo en el caso de las enfermedades crónicas asintomáticas, como es el caso de la hipertensión, o en el número de tomas durante el día relacionadas con los fármacos en los pacientes con enfermedades crónicas asociadas, que suele ser una característica de los pacientes de mayor edad. La distribución horaria fácil de las tomas y adaptada a las costumbres del paciente y el uso de pautas simplificadas de tratamiento ayudan a mejorar la adherencia. En este sentido, las combinaciones de fármacos a dosis fijas son de gran ayuda como han mostrado múltiples estudios”.
Tratar la hipertensión, un trabajo multidisciplinar
El tratamiento de la hipertensión arterial no sólo compete a cardiólogos, sino que es un manejo multidisciplinario que incluye también a nefrólogos, médicos de familia, internistas o endocrinos. Una vez que el profesional sanitario confirma que un paciente precisa de tratamiento antihipertensivo, le es de gran ayuda conocer el descenso de su presión arterial, y qué puede esperar obtener con un determinado medicamento o con una combinación. Por ello, los expertos señalan que cualquier herramienta que les facilite la elección del medicamento en función del descenso necesario de la presión arterial del paciente les será de gran ayuda tanto a ellos como al propio paciente, ya que la adherencia al tratamiento mejora si se efectúan pocos cambios en la pauta prescrita después de los primeros seis meses, han informado fuentes de la compañía Pfizer.
* Empatía: (definición RAE) Identificación mental y afectiva de un sujeto con el estado de ánimo de otro.