Redacción Farmacosalud.com
El cáncer de endometrio presenta altos índices de supervivencia, de tal manera que incluso en los casos más complicados existen soluciones. Por ejemplo, aquellas mujeres que por presentar obesidad no puedan ser candidatas a la extirpación del útero (histerectomía), que “es el tratamiento curativo ideal”, pueden recibir “radioterapia” y obtenerse “buenos resultados”, comenta la doctora Mª Jesús Rubio Pérez, portavoz de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y miembro de la junta directiva del Grupo GEICO (Grupo Español de Investigación en Cáncer de Ovario).
El endometrio es la membrana mucosa que tapiza la cavidad uterina, según el RAE. El útero, el órgano en cuyo interior tiene lugar el embarazo, tiene una cavidad en su interior que es el lugar de la anidación. Esta cavidad está tapizada por un tejido esponjoso, el endometrio, que es ‘la cuna’ que el útero prepara cada mes para la llegada de un posible embrión[1].
El carcinoma de endometrio es uno de los cánceres más frecuentes en la mujer[2]. De hecho, el cáncer de endometrio-útero es el tumor más frecuente de entre los tumores genitales femeninos[3]. Globalmente, es el cuarto cáncer más frecuente en la población femenina tras el cáncer de mama, intestino y pulmón[3]. Con todo, las patologías cancerosas más ‘mediáticas’ en la mujer nos remiten al cáncer de mama y de ovario. La doctora Rubio Pérez explica que hay que diferenciar el cáncer de endometrio del cáncer de cuello uterino (cérvix), puesto que son dos tumores distintos. El tumor endometrial se declara habitualmente “en mujeres mayores y menopáusicas y se diagnostica habitualmente en estadios más iniciales, con un porcentaje elevado de curabilidad”, señala la oncóloga, quien añade que “tal vez sea este el motivo” por el cual el cáncer de endometrio parezca estar en un segundo plano en el ámbito de la opinión pública a pesar de su alta prevalencia.
Así las cosas, el cáncer de endometrio suele dar síntomas en las fases iniciales[3], lo que facilita el diagnóstico precoz y unos buenos resultados de supervivencia a 5 años para la mayoría de pacientes, que oscila entre un 90%-83%[3].
En pacientes por debajo de los 40 años, hay que descartar el Síndrome de Lynch
La mayoría de pacientes de esta enfermedad superan los 50 años de edad, si bien se registran unos pocos casos por debajo de los 40. A este respecto, Rubio Pérez advierte que “en pacientes cuya enfermedad se desarrolla antes de los 40 habría que descartar que no se trate de una enfermedad hereditaria en el seno del Síndrome de Lynch”. Este síndrome es una condición hereditaria que predispone a desarrollar varios tipos de tumores. Las principales características del síndrome de Lynch son el desarrollo de cáncer colorrectal a edad temprana (alrededor de los 45 años), la predilección por el colon derecho en más del 70% de los casos, aumento de la incidencia de tumores sincrónicos y metacrónicos, carcinogenia elevada, y un riesgo aumentado de desarrollar neoplasias extracolónicas (endometrio, ovario, gástricas, tracto urinario, intestino delgado, cerebral, hepatobiliar…)[4].
La inmensa mayoría de pacientes de cáncer de endometrio tienen edades comprendidas entre los 60 y los 70 años, lo que para la experta constituye todo un hándicap, ya que “la edad y el hecho de que las pacientes asocien con frecuencia obesidad con otras patologías, como diabetes e hipertensión, hacen del tratamiento de la enfermedad un reto para el especialista”.
Quimioterapia: para casos de recurrencia y metástasis y en carcinoma tipo II
Hoy por hoy no se conoce ninguna manera de prevenir el tumor endometrial, cuyo síntoma más evidente es el sangrado vaginal anómalo, una alteración que se manifiesta en mujeres menopaúsicas.
La extirpación del útero (histerectomía) es el tratamiento de primera elección. Según la portavoz de la Sociedad Española de Oncología Médica, “la histerectomía es el tratamiento curativo ideal. En mujeres que por IMC -índice de masa corporal- elevado (es decir, existe obesidad) no puedan ser intervenidas, se puede administrar radioterapia con buenos resultados. La histerectomía no suele condicionar la calidad de vida de estas pacientes, ya que son habitualmente menopáusicas”.
El tratamiento hormonal muestra beneficio en casos de recaída
La radioterapia está indicada como tratamiento complementario en todos aquellos tumores que infiltren más del 50% del miometrio. En cuanto a la quimioterapia, se emplea para la enfermedad recurrente o metastásica y como tratamiento complementario en el carcinoma de endometrio tipo II (carcinoma serosos y de células claras)
El tratamiento hormonal (progestágenos) no ha demostrado su utilidad en los estadios iniciales [2] de la afección. La miembro de la junta directiva del Grupo GEICO indica que “el tratamiento hormonal no ha demostrado el beneficio en estadios iniciales, en los que tras cirugía y/o radioterapia el porcentaje de curación es >90%”, de manera que “añadir tratamiento hormonal como tratamiento complementario no aumenta la supervivencia de las pacientes”. En cambio, “sí muestra beneficio en mujeres con recaída de la enfermedad”, agrega.
Referencias
1. Moliner B. ‘¿Qué es el endometrio?’ Página web del Instituto Bernabeu https://www.institutobernabeu.com/foro/2012/01/30/%C2%BFque-es-el-endometrio/
2. Comino Delgado R., Sainz de la Cuesta Abad R., Jurado Chacón M., Xercavins Montosa J., Petschen Verdaguer I. (coordinador Balagueró Lladó L.) ‘Carcinoma de endometrio’. Documentos de Consenso S.E.G.O. Difusión online Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (S.E.G.O.) http://www.sego.es/Content/pdf/carcinomaendometrio.pdf
3. Bover Barceló IM. ‘Cáncer de endometrio-útero’. Difusión online a cargo de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) http://www.seom.org/en/informacion-sobre-el-cancer/info-tipos-cancer/ginecologico/endometrio
4. Ferrer Márquez, M., Reina Duarte A., Maturana Ibáñez V., Belda Lozano R., Rubio Gil F., Blesa Sierra I., Rico Morales MdM. ‘Síndrome de Lynch: genética y cirugía’. Cir Esp 2011;89:3-9 - DOI: 10.1016/j.ciresp.2010.06.010. Vol. 89. Núm. 1. 01 Enero 2011. [cita a la referencia 3: W. Al-Sukhni,M. Aronson,S. Gallinger. ‘Hereditary colorectal cancer syndromes: Familiar adenomatous polyposis and Lynch syndrome’. Surg Clin N Am., 88 (2008), pp. 819-844 http://dx.doi.org/10.1016/j.suc.2008.04.012. Artículo | Medline] Difusión online Elsevier http://www.elsevier.es/es-revista-cirugia-espanola-36-articulo-sindrome-lynch-genetica-cirugia-S0009739X10004033