Redacción Farmacosalud.com
El conocido como ‘prime time’, u horario televisivo de máxima audiencia, hace correr ríos de tinta en España por sus franjas de emisión. Según se puede leer en un artículo publicado en la Fundación Unir (Universidad Internacional de La Rioja), “España tiene el horario de máxima audiencia -donde se emiten los programas estrella- más trasnochador del mundo”, como lo demuestra el hecho de que “el inicio del plato fuerte de la noche se ha ido retardando con el objetivo de arrastrar audiencia durante un mayor período de tiempo”, de tal manera que “la mayoría de las cadenas suelen comenzar su emisión a las 22.30 horas de la noche y terminar pasadas las 00.00h”. La televisión ‘a la carta’ -ver un programa a la hora que el televidente quiera- está en ascenso pero no es todavía una opción mayoritaria, por lo que el prime time aún manda en los hogares españoles.
Así las cosas, los médicos especializados en trastornos del sueño piden adelantar la hora del prime time de la televisión con el fin de que los programas estelares acaben antes y ello favorezca que los usuarios se acuesten más pronto, lo que permitiría mejorar la calidad del descanso nocturno de los teleespectadores. “Un estudio reciente realizado entre estudiantes europeos demostró que adelantando la hora de irse a dormir se incrementaba su rendimiento académico”, aduce el presidente de la Sociedad Española de Sueño (SES), el doctor Joaquín Terán-Santos, quien remarca que acostarse antes también se erigiría como una medida eficaz para luchar contra el insomnio.
Hasta un 30% de la población con un déficit crónico de sueño
La Sociedad Española de Sueño, entidad científica que agrupa a los médicos especializados en el diagnóstico y tratamiento de los trastornos del sueño, ha publicado el informe ‘Sueño saludable: evidencias y guías de actuación’, en el que se analiza la literatura disponible sobre los hábitos de descanso y se ofrecen una serie de recomendaciones encaminadas a mejorar la higiene del sueño de los españoles. Entre estas recomendaciones, los médicos piden que se modifique el horario televisivo “para adelantar las emisiones en prime time, con el fin de conseguir que los ciudadanos se acuesten antes e incrementen la duración del sueño”. La SES considera que debe plantearse esta medida para invadir lo menos posible la hora de irse a la cama porque, como afirma Terán-Santos en unas declaraciones difundidas por la SES, “lo que realmente condiciona la duración del sueño y su calidad es la hora de acostarse; invadir horas de sueño de este periodo tan biológicamente activo es una autoagresión para nuestra salud tan relevante como el tabaquismo”.
Para el doctor Terán-Santos, redefinir la ubicación horaria del prime-time televisivo en España no es algo que incumba a los médicos, ya que tomar esa decisión “obviamente corresponde a las propias televisiones. Lo que nosotros pedimos es que no se invadan las horas de sueño y descanso. Hay un 30% de la población con un déficit crónico de sueño y esto condiciona problemas de salud relevantes como alteraciones en nuestro sistema inmune, alteraciones cardiovasculares, o alteraciones metabólicas del tipo de la obesidad. Reclamamos el derecho a un sueño saludable y eso es lo que queremos trasmitir a la población”.
“Hemos de procurar poner lo elementos para que los españoles se vayan antes a dormir -destaca a través de www.farmacosalud.com el presidente de la SES-. La hora en la que nos acostamos es lo que realmente marca el número de horas de sueño y por lo tanto en gran medida la calidad de sueño. La hora de levantarse es algo que no podemos cambiar porque hay que ir a trabajar o a la escuela a unas determinadas horas. Sin duda, irse a dormir una hora antes hará que el descanso sea mejor y, por ejemplo, sea también mejor el rendimiento y atención de las personas durante la vigilia. Un estudio reciente realizado entre estudiantes europeos demostró que adelantando la hora de irse a dormir se incrementaba su rendimiento académico. Es importante también reseñar la posible influencia en aspectos ligados a la accidentabilidad laboral o de tráfico, en definitiva, a la capacidad productiva de un país”.
Es más, adelantar el horario de máxima audiencia televisiva también beneficiaría a aquellos sujetos a los que les cuesta dormir, tal y como apunta el experto: “Establecer hábitos saludables es uno de los elementos básicos para que mejoren las personas que tienen trastornos como insomnio o apnea del sueño. Por tanto, si las personas se van antes a descansar y, sobre todo, hacen de ello un hábito, va a ayudarles, sin duda, a conciliar el sueño. El sueño es un imperativo biológico que no se puede invadir sin que tenga consecuencias en nuestra salud”.
Atención a los dispositivos de luz electrónicos
El informe de la SES, que está dirigido tanto a profesionales de la salud como a ciudadanos en general, analiza la influencia en el descanso nocturno de factores como el entorno ambiental (ruido, temperatura, iluminación…), la alimentación o el deporte. Asimismo, incluye consejos como la duración que debe tener el sueño según diferentes grupos de edad, o los alimentos que pueden ayudar a facilitar o dificultar el descanso. Se incluyen también apartados específicos para niños y adolescentes, trabajadores a turnos y conducción de vehículos.
Tal y como se destaca en el estudio, el entorno ambiental es un elemento esencial que debe cuidarse para conciliar y mantener el sueño. En este sentido, los médicos recuerdan que, por ejemplo, que “la luz emitida por dispositivos electrónicos utilizados antes del horario habitual de sueño produce un retraso de fase de la actividad del núcleo supraquiasmático y, en consecuencia, se retrasa la secreción de melatonina, aumenta la alerta, se retrasa el inicio del sueño y disminuye la vigilancia por la mañana”[1]. Por esta razón, los especialistas recomiendan “evitar el uso de dispositivos electrónicos con emisión de luz al menos dos horas antes del horario de sueño habitual”. Las recomendaciones principales para mantener un buen entorno ambiental son dormir en la oscuridad, en una habitación ordenada y silenciosa, y a una temperatura de entre 18 y 21º.
¿Cuánto hay que dormir para un sueño saludable?
Cada edad y cada persona presentan unos horarios de descanso propios en los que la eficiencia, duración y profundidad de sueño son óptimos; sin embargo, no siempre es fácil reconocer cuáles son estos horarios. En el documento, la SES incluye las recomendaciones de la National Sleep Foundation, que definen los siguientes horarios de duración de sueño para los diferentes grupos de edad:
• Recién nacidos (0-3 meses), 14-17 h.
• Lactantes (4-11 meses), 12-15 h.
• Niños pequeños (1-2 años), 11-14 h.
• Niños en edad preescolar (3-5 años), 10-13 h.
• Niños en edad escolar (6-13 años), 9-11 h.
• Adolescentes (14-17 años), 8-10 h.
• Adultos (18-64 años), 7-9 h.
• Ancianos (> 65 años), 7-8 h.
Los médicos recuerdan que lo indicado es mantenerse dentro de estos límites recomendados, ya que “tanto el exceso como la privación de sueño son perjudiciales para el sistema metabólico, endocrino e inmunológico”. Por ejemplo, en los ancianos “un sueño de una duración superior a nueve horas se asocia a una mayor morbilidad (hipertensión, diabetes, fibrilación auricular...)”.
Alimentación y sueño: un binomio inseparable
La alimentación es el proceso por el cual se obtienen nutrientes esenciales para el desarrollo de todas las funciones vitales del organismo, entre ellas el descanso. Por ello, la SES considera que alimentación y sueño son un binomio inseparable. Los médicos recuerdan que “al igual que lo que ingerimos y cuándo lo hacemos influye en la calidad del sueño, un sueño insuficiente o de mala calidad puede afectar nuestra conducta alimentaria”. Así, por ejemplo, la reducción del sueño se relaciona directamente con la obesidad, dado que “supone un aumento en la producción de ghrelina, hormona que aumenta el apetito, y disminución de leptina, hormona que disminuye el apetito, y aparece un incremento de la ingesta calórica por la noche, con preferencia por alimentos de alta densidad energética como las grasas o hidratos de carbono refinados”.
El informe analiza como el consumo de algunos alimentos puede facilitar o perjudicar el descanso si se consumen horas antes de dormir. Entre los que facilitan el sueño se incluyen “los alimentos ricos en triptófano (precursor de melatonina y serotonina) como lácteos, plátanos, carne, pescado azul o frutos secos como las nueces, así como hidratos de carbono de absorción lenta, como la miel en pequeña cantidad y el pan integral”. Por el contrario, el documento recomienda evitar en las últimas horas del día “alimentos ricos en tirosina, como las frutas ricas en vitamina C (naranja o kiwi), bebidas como el té o el café, o carnes rojas y embutidos, dado que la tirosina es un aminoácido precursor de las catelocaminas y la dopamina, que son las que nos hacen permanecer despiertos”.
Reducir la espera diagnóstica de 80 a 16 semanas
En otro orden de cosas, desde hace dos años el Hospital Universitario Araba de Vitoria (HUA) ha puesto en marcha, gracias a la colaboración de expertos de la firma automovilística Mercedes-Benz en Vitoria, el Laboratorio Virtual de Sueño, que aplica la metodología empresarial Lean en la gestión y organización de las tareas propias de una Unidad de Sueño. Los resultados son muy destacados: el tiempo de espera desde la primera visita hasta la obtención del diagnóstico y la prescripción de un tratamiento para los trastornos del descanso ha ido disminuyendo progresivamente de 80 a 16 semanas. El desarrollo de esta experiencia pionera e innovadora así como sus resultados se han expuesto y debatido en la XXI Reunión de Invierno Conjunta de Áreas de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
“La idea surgió al ver como Mercedes-Benz Vitoria era capaz de entregar un coche personalizado y a medida en apenas dos meses, mientras nosotros podíamos tardar un año en dar un diagnóstico a nuestros pacientes” explica el Dr. Carlos Egea Santaolalla, coordinador del Área de Sueño de SEPAR e impulsor de la idea. “Nos pusimos en contacto con esta marca y juntos hemos llevado a cabo una revisión completa de nuestro modo de trabajar aplicando la filosofía y metodología Lean Management”, agrega.
El Lean Management es un modelo de gestión empresarial que tiene como objetivo ‘limpiar’ los procesos productivos, es decir, obtener las cosas correctas en el momento oportuno, en la cantidad precisa, minimizando el despilfarro, siendo flexible y estando abierto al cambio. “Con la ayuda de tecnico-expertos hemos extrapolado las metodologías del Lean Thinking o el Lean Management revisando y analizando todos nuestros procesos desde el punto de vista de la eficiencia y basándonos en varios fundamentos: eliminar ‘desperdicios’ en los procesos, es decir, agilizar y racionalizar, e involucrar a todo el equipo y con voluntad de mejora continua. El resultado es la creación del Laboratorio Virtual de Sueño en el hospital”, cuenta el Dr. Carlos Egea. El Laboratorio Virtual de Sueño gestiona desde esta nueva perspectiva los recursos humanos y técnicos ya disponibles en el hospital con el fin de mejorar la atención al paciente.
Los resultados son incontestables: la lista de espera ha bajado en un 72% y el tiempo trascurrido desde la primera visita de un paciente hasta obtener el diagnóstico y poner en marcha el tratamiento ha bajado de forma progresiva. En la primera fase, con la puesta en marcha del Laboratorio Virtual de Sueño 1.0, el tiempo de espera pasó de 80 semanas a 60 semanas; en la segunda fase, con el Laboratorio 2.0 el tiempo se fijó en 16 semanas. Según Egea, “las claves han sido automatizar y agilizar las pruebas, una mayor aproximación a la atención primaria, un buen manejo de la historia clínica electrónica del paciente y, lo más importante, recoger datos y evaluarlos para aprender de ellos”. El Laboratorio Virtual de Sueño entra en la fase 3.0: sus objetivos prioritarios son ahora aumentar la monitorización de enfermos en casa, lo que supondría la descongestión de visitas al hospital, y la incorporación del paciente activo que ayude al equipo en la toma de decisiones.
Referencias
1. Gringras P, Middleton B, Skene DJ, Revell VL. Bigger, brighter, bluer-better? Current light-emitting devices-adverse sleep properties and preventative strategies. Front Public Health 2015; 3: 233