Redacción Farmacosalud.com
Un total de 88 especialistas españoles han contribuido, mediante una encuesta, a establecer criterios que permiten definir el cáncer de mama agresivo y cómo actuar frente a él. El resultado del sondeo se ha materializado en el primer ‘Consenso sobre cáncer de mama agresivo HER2 negativo en primera línea de quimioterapia’, cuyo contenido clarifica, por fin, un panorama un tanto enmarañado por la vaguedad de las guías internacionales en sus definiciones de enfermedad agresiva. Hasta ahora, el profesional oncólogo tiraba de su experiencia a la hora de catalogar un tumor mamario de especial virulencia, pero las dudas razonables podían aparecer y nada mejor que un documento consensuado para establecer unos criterios claros y bien definidos. Para la doctora Ana Lluch, jefa del Servicio de Hematología y Oncología Médica del Hospital Clínico de Valencia, quienes también se van a beneficiar del nuevo documento son los oncólogos en período de formación, puesto que “les va a servir para ayudar a catalogar a las pacientes en su faceta clínica y sobre todo a tomar decisiones de cara al tratamiento a adoptar”.
El 80% de los casos de cáncer de mama son tumores mamarios HER2, de los cuales un 35-40% presentan criterios de mayor virulencia y peor pronóstico. “Son pacientes que están definidas por el hecho de que no expresan receptores hormonales, son las pacientes triple negativas… están consideradas las pacientes con enfermedad más agresiva que el resto. Definir la enfermedad agresiva es importante porque hasta ahora en las guías clínicas no había una definición clara de lo que se consideraba enfermedad agresiva”, argumenta Lluch en declaraciones a www.farmacosalud.com.
Los tumores mamarios más virulentos provocan recaídas
La idea de crear el mencionado documento de consenso surgió, entre otras razones, por el hecho de que las guías internacionales son un tanto confusas a la hora de definir lo que es una patología virulenta. “No hay criterios claros, definidos clínicamente, cuando se habla de lo que es una enfermedad agresiva. Los criterios han sido muy ambiguos y en estas guías no están bien definidos. Por eso era importante saber la opinión de los oncólogos españoles en relación a lo que se considera una enfermedad con características agresivas”, explica la facultativa. En el caso del cáncer de mama, las enfermas que sufren los tumores más virulentos “recaen en su enfermedad y tienen síntomas de enfermedad avanzada, con metástasis y patología tumoral a nivel hepático, a nivel de pulmón”, comenta. El documento intenta que “los oncólogos puedan caracterizar y tener un claro objetivo de cuándo una paciente precisa un tratamiento de quimioterapia para intentar controlar más rápidamente la enfermedad”, subraya la doctora Lluch, que ha participado en la coordinación del Consenso.
De acuerdo con la experta, la patología agresiva HER2 negativo comprende, sobre todo, las pacientes que son triple negativas: son enfermas con síntomas clínicos de enfermedad mucho más aparentes para la afectada y que precisan ser controlados de forma más rápida. “Son pacientes -precisa- que tienen lo que llamamos, desde que las operaron hasta que tienen enfermedad sistémica, un intervalo corto… son enfermas que presentan síntomas clínicos que precisan ser controlados rápidamente; todo eso es lo que más define la enfermedad agresiva. Y así ha quedado claro con la encuesta a los oncólogos, que han definido lo que para ellos significa una enfermedad con cáncer de mama metastásico con este tipo de proceso agresivo”.
Las triples negativas responden mejor a la quimioterapia
En la mayoría de casos de cáncer de mama agresivo se suele administrar quimioterapia “porque lo que nos interesa es una respuesta más rápida […] Cuando la enfermedad es más proliferativa y de crecimiento más rápido, la respuesta a los tratamientos de quimioterapia suele ser mucho más rápida. Por ejemplo, las pacientes con triples negativos responden posiblemente mejor a los tratamientos de quimioterapia y a tratamientos más agresivos”, según la doctora. Por lo que respecta al tratamiento hormonal en relación a los tumores mamarios más virulentos, “en estos casos sabemos que el tratamiento hormonal suele ser menos efectivo; aunque nosotros planteemos dar un tratamiento hormonal, tendremos que estar muy atentos porque son pacientes que responden peor a estas terapias”, concluye.